Quisiera atrapar los días lejanos
Que el viento arrojó al olvido.
Volver a pronunciar un“TE AMO”
Con los labios temblando.
El tiempo, fiel a sus límites,
Fue pintando las canas,
Llevándose consigo
Los sueños de antaño.
Más si el pasado regresa,
Retornarán las lágrimas
En esta noche sombría,
Tan solitaria y fría.
Intento vedar los recuerdos
Que se clavaron en mí.
Mi corazón, nicho de duelo,
Me impide decir adiós.
Me aferro a lo poco que queda,
Ese vacío de la no espera,
Pesadumbre oscura de saberme,
Acaso, una sombra muerta.
Haz a un lado loa recuerdos y caminos que separan del nicho la estrella, Myriam, y aquí y ahora vístete de quince primaveras...
ResponderEliminarEn mi interior, soy una eterna adolescente, por fuera, y, Theo, la vida golpea, no? TKM
EliminarHola Amiga. Maravilloso escrito. Me encanta seguir tus letras. TQM. Besos.
EliminarUh, qué linda sorpresa, querido Hector, no esperaba verte por aquí, y de verdad que es una enorme alegría ¡Muchas gracias, besos, te quiero mucho!
EliminarCuanta nostalgia en estos magistrales versos querida amiga, un gusto disfrutar de tus pbras poéticas, abracito desde México.
ResponderEliminarNolstalgía había en mí cuando lo escribí, Ma Glo, preciosa. Muchísimas gracias, besos miles
EliminarMe resulta muy bien logrado el poema, amiga. Siempre es un placer leerte.
ResponderEliminarBeso
Muchas gracias, Pichy querido. Besos
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