Señores del Olimpo,
Esta sumisa mortal
Os viene a implorar
Que le prestéis atención.
Provengo de un universo
¡Ay, que larga la travesía!
Acullá de vuestro Edén,
Planeta donde impera el caos.
Si vosotros podéis
Prescindir, hoy, de él,
Entregaos a vuestro Dios
¡Alguno debéis tener!
El planeta perece,
La congoja nos anega,
Requerimos algún Dios,
Si es guapo, tanto mejor.
Cualquiera nos viene bien
Dada la penosa situación,
No vamos a ponernos exigentes,
Si pueden ser dos, mucho mejor.
Bajadlos de la peana
Allí donde los guardáis,
Permitidles la caída,
Ya lo hicisteis con Luzbel.
Que expandan las alas,
Que planeen sobre esta caterva
De millones de vagonetas
Y les den un buen sacudón.
Debemos recuperar la risa,
Ese júbilo pestilencial,
El humor descabezado
Porque acá, está todo mal.
Miryam, como bien dices en tu intenso poema imploremos a todos los dioses. para que nuestro planeta se pueda recomponer.
ResponderEliminarMe encanto. Besos mi linda amiga.
Sucederá, Pastora, ya tocamos fondo, más es imposible. No sé si llegaré a ver el nuevo mundo pero estaré feliz de saber que las generaciones venideras lo harán. Gracias por la visita, hermosa, muchos besos.
EliminarOjalá te escuchen, amiga. Muy bien.
ResponderEliminarBeso
Ah, Pichy, a mí se me escucha o pataleo y grito hasta que me lleven el apunte jajajaja. Besos!!!!
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