Porque creí en
ti una y mil veces,
Mil y unas
veces lloré.
Mi ánimo se
derrumbó.
A ti te
pregunto, amigo del alma
¿Vale la pena
tanto dolor?
Tantas horas conllevadas
Entre café y
cigarrillos,
Mis secretos
más furtivos
En tu corazón atesoré
Pensando que
eras mi bálsamo.
Me entregaste,
a cambio de eso,
Angustia y
desolación.
Fuiste mi fiel
confidente,
Pero el hombre
te venció.
Descubriste a
la mujer.
La amiga se
desvaneció.
Tremendo y gran
error
Arrojar a la
basura
Una sublime amistad,
A cambio de un
poco de sexo.
Procuraste ser
el dueño
De mi cuerpo,
de mis besos…
¡Qué frívola presunción!
¿Qué esfera
ocupó mi esencia?
Fue mi pregunta
directa.
Me sorprendió
tu respuesta
¡A qué lo voy a
negar!
No acepté esa
nueva realidad.
Eras mi amigo,
mi hermano,
Afecto que no sucumbe
jamás.
¿Por qué transmutar
algo tan puro
En un pasatiempo
sexual,
Habiendo tantas
mujeres
Que saciaran tu
apetito?
Tu rostro se
ruborizó.
Abandonaste a
la amiga,
Preferiste a la
mujer.
Yo no puedo ver
al hombre,
Sólo admitir tu
amistad.
¿O acaso nunca
lo fuimos?
Bien se me da el poema, amiga. De mucho realismo.
ResponderEliminarBesos
Viste qué cosa? Yo creo tanto en la amistad entre el hombre y la mujer... pero no siempre pasa lo mismo con los hombres, y no digo todos, digo algunos... Besos, muchas gracias por tu eterna presencia.
EliminarPara una amistad se necesitan dos intenciones, y para tener sexo también. La propuesta puede ser real pero lo importante es la aprobación o no de aquella fase totalmente distinta entre dos seres. Todo cambia, y la amistad queda atrás. Es mejor pensar bien antes, para no perder lo que se valora tanto. Un beso Myriam.
ResponderEliminarMuy certeras tus palabras, Paty querida, y por eso el título, pues si no hay correspondencia, ante la propuesta surge la conmoción. Muchas gracias por visitarme. Besos
EliminarHola Myriam.
ResponderEliminarMagnifico poema con una gran reflexión sobre un tema muy actual por cierto.
Felicitaciones.
Besos
A mi me pasó varias veces, Ricardo, y te confieso que me dolió mucho porque yo creo en la amistad entre un hombre y una mujer. Gracias por pasar. Besos
EliminarLas cuentas claras conservan la amistad.
ResponderEliminarCariños para ti, amigaza
Beto Brom desde Israel
Eso mismo, Beto querido, no se debe mezclar las cosas porque, finalmente, no queda nada, ni amor ni amistad. Un abrazo, muchas gracias por la visita.
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