Arde mi cuerpo sediento
de ti.
Me dispongo con esmero,
Acicalo mi piel dejándola suave;
Mis manos tersas, las piernas de seda
Para enredarse en las tuyas
Con envolventes meneo.
Y te encuentro en mi cama
Y mi mirada te busca
Ansiando las caricias
Que espero con impaciencia.
Estoy dispuesta a dártelo todo
También mi alma, no sólo mi cuerpo
Abandonándome a tu voluntad
Pero no encuentro tu mirada.
La pasión te está consumiendo.
Cabalgando con prisa y sin pausa,
Comprendo cuando me miras
Que para ti no tengo alma,
Que tus besos no son de fuego,
Que tus caricias son ficticias,
Que sólo buscas calmar tu sed.
Se terminó el sublime acto
Y no me topé con tu amor
Cierro los ojos y lloro.
Lloro por mí
Lloro por ti.
Emotivo canto al amor y a las pasiones, te felicito mi adorable amiga, un fuerte abrazo
ResponderEliminarMe gusta saber que estás aquí, Manuel, con tus palabras de aliento, esas que me impelen a no desistir. Un abrazo muy fuerte para vos. Gracias.
EliminarExcelente!! muchos habitamos el mismo infierno. <besos amiga.
ResponderEliminarEs la vida, mi querida Bea...sueños que se concretan, sueños que se quiebran pero hay que seguir, no queda otro camino, siempre seguir esperando el nuevo amanecer que nos conduzca desde el infierno al paraíso. Besos, preciosa, muchas gracias por tu visita.
Eliminar