Y me
adentro en el mar,
No me
amedrentarán las olas,
Porque
ellas, mis confidentes,
Tienen
de mi amante su aroma.
No
importa si no retorno,
Si la
playa queda desolada,
Pues
más allá del horizonte
He de
encontrarte, mi amado.
Será el
abismo testigo
De la
unión de dos amantes,
Que
presos de la pasión
Se
fundirán en las aguas.
Bañados
los cuerpos, de sal y de algas,
Profesándonos
bendito amor,
Haremos
un pacto de dos
Bendecido
por el Señor.
Y Dios bendijo el hermoso amor entre un hombre de mar y una bella , apasionada y romántica sirena y el olor a sal se fundió en una sola piel
ResponderEliminarBesos
André
Muchísimas gracias, Andres, besos!!!!
EliminarLindura de imágenes y hermosura de versos, amiga. De mucho gusto.
ResponderEliminarBeso
Gracias, Pichy, fiel amigo y lector, besos!
EliminarMaravillosas letras mi querida Myriam, nos das lo mejor de ti. Un abrazo con todo mi cariño.
ResponderEliminarAh mi querido amigo, Hector, ustedes se merecen lo mejor. Muchas gracias por tus palabras y visita, besos y abrazos
EliminarUn mar inspirador que radia amor, en tus letras amiga mía queda constancia viva del momento.
ResponderEliminarBesos y mi cariño.
Pocas veces me voy del mar sin escribir un poema, sentarme en la arena y mirarlo atentamente es un buen estimulante para escribir. Gracias, princesa, besos!!!
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